COMENTARIO DEL VIDEO
“TE DOY MIS OJOS”
Una
conmovedora historia de dolor y esperanza, que revela el agobiante mundo de la
violencia intrafamiliar y los esfuerzos que se hacen para salir de él, siendo
esto solamente posible, si el propósito de lograrlo es liberarse a uno mismo.
Una de las virtudes de esta película es que trata de analizar los motivos y la psicología del maltratador, sin que ello signifique identificarse con él. La película busca las razones que llevan a Antonio a maltratar a Pilar, trata de entender qué le está pasando y, a la vez, se distancia de él, por su comportamiento. Algunas escenas de la película nos ayudan a reflexionar sobre el comportamiento de un maltratador.
Cuando Pilar quiere hacer otras cosas (trabajar o aprender cosas nuevas), a ser más autónoma, Antonio se siente inferior y tiene miedo de que ella acabe encontrando a otro hombre que le ofrezca otras cosas que él no puede. Ante esta situación, reacciona tratando de controlarla y de evitar que desarrolle sus capacidades, y empieza a humillarla, ridiculizarla, aislarla. Su miedo e inseguridad le llevan a reforzar su idea de que Pilar es su posesión y actúa con la intención de dominarla absolutamente.
El problema de Antonio es que está confundiendo amor con posesión y esto le lleva a no dejar que Pilar pueda crecer, que se desarrolle como persona. Del amor a la pareja está pasando al control y a dejar de tenerla en cuenta como persona, aunque él piensa y diga que eso es querer.
La película permite ver cómo las relaciones de poder de género son normalizadas socialmente. La figura de la madre nos habla de ello. Según parece, ella también vivió una situación de maltrato, pero en lugar de denunciarla, evita ver lo que le sucede a su hija, quitándole importancia al problema y haciendo como si fuera algo normal. La película nos hace tomar conciencia que en nuestra sociedad así como Pilar hay muchas mujeres pasando por lo mismo y que no debemos permitir que un hombre nos humille así como lo hace Antonio, mujeres basta con este abuso, ya basta de callar, hay que demostrar que nosotras valemos como personas y sobre todo como mujeres.
Una de las virtudes de esta película es que trata de analizar los motivos y la psicología del maltratador, sin que ello signifique identificarse con él. La película busca las razones que llevan a Antonio a maltratar a Pilar, trata de entender qué le está pasando y, a la vez, se distancia de él, por su comportamiento. Algunas escenas de la película nos ayudan a reflexionar sobre el comportamiento de un maltratador.
Cuando Pilar quiere hacer otras cosas (trabajar o aprender cosas nuevas), a ser más autónoma, Antonio se siente inferior y tiene miedo de que ella acabe encontrando a otro hombre que le ofrezca otras cosas que él no puede. Ante esta situación, reacciona tratando de controlarla y de evitar que desarrolle sus capacidades, y empieza a humillarla, ridiculizarla, aislarla. Su miedo e inseguridad le llevan a reforzar su idea de que Pilar es su posesión y actúa con la intención de dominarla absolutamente.
El problema de Antonio es que está confundiendo amor con posesión y esto le lleva a no dejar que Pilar pueda crecer, que se desarrolle como persona. Del amor a la pareja está pasando al control y a dejar de tenerla en cuenta como persona, aunque él piensa y diga que eso es querer.
La película permite ver cómo las relaciones de poder de género son normalizadas socialmente. La figura de la madre nos habla de ello. Según parece, ella también vivió una situación de maltrato, pero en lugar de denunciarla, evita ver lo que le sucede a su hija, quitándole importancia al problema y haciendo como si fuera algo normal. La película nos hace tomar conciencia que en nuestra sociedad así como Pilar hay muchas mujeres pasando por lo mismo y que no debemos permitir que un hombre nos humille así como lo hace Antonio, mujeres basta con este abuso, ya basta de callar, hay que demostrar que nosotras valemos como personas y sobre todo como mujeres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario